La lactancia es un proceso natural, pero también es aprendido. Cada experiencia es única, y conocer algunos puntos clave puede ayudarte a transitarla con más confianza y tranquilidad.
1.La leche materna es suficiente:
Tu cuerpo produce lo que tu bebé demanda. La mayoría de las veces, no hay problemas de producción, si no problemas de expectativas que no coinciden con el comportamiento y biología de un bebé.
2.Tu bebé no solo llora por hambre:
El llanto puede deberse a muchas razones: sueño, incomodidad, necesidad de contacto, etc.
3.La postura y el agarre son importantes al inicio:
Un buen agarre evita dolor y ayuda a que tu bebé tome leche de manera eficaz.
4.La lactancia debería ser agradable y no un momento doloroso:
Si duele, algo se puede mejorar. Te recomiendo buscar ayuda antes de que se complique.
5.Tu bebé puede pedir el pecho muy seguido, y es normal:
Las tomas frecuentes son parte del proceso.
6.No necesitas un horario para amamantar:
La lactancia es a demanda. Tu bebé sabe cuándo necesita comer.
7.Prepararte desde el embarazo puede marcar la diferencia en el inicio de tu lactancia.
8.Puedes amamantar aunque estés enferma:
En la mayoría de los casos la lactancia no se contraindica, y seguir lactando ayuda a proteger a tu bebé con tus anticuerpos.
9.Sacarse poca leche con el extractor no significa que tengas poca leche:
El bebé extrae leche mejor que cualquier extractor. La cantidad que logras sacar no es un reflejo real de tu producción.
10.Pedir ayuda a tiempo hace la diferencia:
Si tienes dudas o dificultades, buscar apoyo temprano puede evitar que el problema se vuelva más grande y complejo con el paso del tiempo.
Estefania Salinas - Puericultora